La Xunta autoriza que se retome la obra en el atrio de la iglesia de Dexo

Aunque en un principio se dispararon las alarmas de la emoción, con el paso de los días se está demostrado que la realidad es mucho más prosaica y que los restos humanos desenterrados la pasada semana en el atrio de la iglesia de Dexo no deben de tener especial trascendencia arqueológica y mucho menos forense.

De otro modo no se entendería la decisión adoptada por la Xunta que ha resuelto, después de haberlos paralizado, que se retomen los trabajos para reducir humedades en el templo levantado a lo largo del siglo XII. Patrimonio paró la mejora después de que el Bloque Nacionalista Galego local, a petición de los vecinos, se interesase por su situación legal, teniendo en cuenta, además, que una vez comenzadas las excavaciones se estaban exhumando restos supuestamente humanos.

Autorizaciones

Fuentes del Gobierno autonómico ya indicaban, en un primer momento, que la empresa encargada de la obra contaba con todas las autorizaciones pertinentes pero a la espera del proyecto de control arqueológico, requisito indispensable para realizar trabajos en este tipo de recintos.

Ahora con toda la documentación en regla puede continuarse una iniciativa con la que se pretende que las filtraciones de agua afecten lo mínimo posible a uno de los inmuebles más emblemáticos de Oleiros por su trascendencia histórica.

Cabe recordar que el martes, día 2, agentes de la Policía Local oleirense se desplazaron hasta Dexo tras recibir una denuncia del BNG. “Hai que ter en conta que o adro da igrexa é un camposanto e froito das actuais obras pódense aprezar o que aparentemente son restos óseos, máis concretamente caveiras humanas. Estes presumíbeis restos humanos apareceron a simple vista e dun xeito superficial”, decía el portavoz, Iván Roca, al tiempo que aseguraba que cualquier intervención en inmuebles protegidos, como es el caso de la iglesia de Dexo, declarado BIC en 1982, requiere una autorización de la Xunta y que otorga Patrimonio. 

Pregunta en el pleno 

No obstante, la cuestión aunque en un principio parece estar liquidada y solucionada el edil nacionalista tenía previsto elevarla a pleno. 

“Pediremos tamén ao Concello que informe das medidas, licenzas, resultados da inspección policial e demáis circunstancias nas obras da igrexa, alén de se se procedeu da maneira máis garantista cun elemento tan senlleiro, icona de Oleiros polos seus valores”, apostillaba Roca.